1.-
El legado artístico del mundo musulmán:
El
arte de Al-Andalus pasa por tres grandes etapas:
a)
La etapa califal donde destacan la mezquita de Córdoba y el palacio
de Medina-Azahara.
b)
La etapa taifa y almohade, representada por la Giralda y la Torre del
Oro de Sevilla y el palacio de la Aljafería de Zaragoza.
c)
Etapa granadina o nazarí, en la que destaca el palacio de la
Alhambra y los jardines del Generalife.
La
influencia del arte musulmán pervivió a través del arte mozárabe
que influyó en los orígenes del arte románico y en el arte
mudejar, influido por el trabajo de albañiles musulmanes que
trabajaron hasta el siglo XVI.
1.2.-
La Arquitectura:
Sintetizó
elementos anteriores paleocristianos, bizantinos, y en España,
romanos y visigóticos. Al combinar la herencia oriental y
occidental, hasta alcanzar un esplendor admirable.
En
sustitución de los sillares de piedra se optó por materiales más
pobres y blandos, como el ladrillo, la madera y el estuco, más
dúctiles para la decoración minuciosa. Prestaron más atención a
lo ornamental que a lo estructural. Por ejemplo, los nervios de las
bóvedas no se cruzaban en el centro.
Se
empleó el arco de herradura enmarcado en un alfiz, los arcos
lobulados y la pintura de las dovelas con colores alternados.
Mezquitas
y palacios:
A
mediados del siglo VIII el emir Abderraman I ordenó el inicio de la
construcción de la mezquita de Córdoba que fue continuada por sus
descendientes y rematada por Almanzor en tiempos del califato. Su
rasgo más original es la superposición de columna y pilar para
resolver el problema de la altura, convirtiendo la sala de columnas
en un extraordinario bosque de piedra y mármoles. Las dovelas están
coloreadas en blanco y rojo. En las puertas y zonas nobles como el
mirhab, construido en tiempos de Al-Hakam II , mármoles, dovelas
pintadas y letras como ornamentación caligráfica.
Muy
importante fue, asimismo, la impresionante ciudad-palacio
de Madinat al-Zahra, edificada en tiempos de Abd-al-Rahman
III. Para su construcción se trajeron materiales de diversos
lugares, como el norte de África, de donde procedía el mármol.
Madinat
al-Zahra albergaba, en su parte superior, una serie de palacios;
en la zona media, jardines y vergeles, y en la parte inferior, la
mezquita mayor y las viviendas de los servidores de palacio.
Desafortunadamente, durante la guerra civil que precedió a la
desaparición del califato, Madinat
al-Zahra fue destruida.
La
Alhambra de Granada junto al paisaje de Sierra Nevada es un
palacio-fortaleza construido entre los siglos XIV y XV. Se compone de
un conjunto de torres, murallas, jardines y patios en su zona militar
y de habitaciones interminables para el servicio en su zona palatina
que culmina en la residencia del rey. Destaca el salón del trono o
la sala de Abencerrajes con patios como el de los Leones o el de
Comares, donde las fuentes son elemento destacado. La ornamentación
cuenta con cuenta con arcos peraltados con gallones, mocárabes,
dorados de las maderas, mosaicos geométricos y caligráficos.
Junto
al palacio que se fusiona con el paisaje se encuentran los jardines
del Generalife.